Situado en una hacienda del siglo XVI, aquí tendrás 5 hectáreas para crear un evento inolvidable.

A solo 15 minutos del corazón la ciudad de San Juan del Rio,  25 minutos del aeropuerto internacional, y a 40 minutos de la ciudad capital encontrarás está hacienda emblemática de la región.

  Misión San Gil, de un estilo verdaderamente colonial mexicano que incorpora travesaños de madera, detalles de forja y tonos cálidos que crean una atmósfera  espectacular. Mención aparte sus amplios jardines donde la naturaleza se te vuelve protagonista, y qué decir de sus hermosos pavorreales que han hecho de estos jardines su hogar.

La hacienda Misión San Gil cuenta  con 10 salones con capacidad desde 10, hasta 1,000 personas. Sus jardines pueden albergar hasta 1100 invitados.

 Prácticamente cualquier rincón de esta hacienda Misión San Gil puede convertirse en el lugar ideal para tu celebración, el límite es la imaginación y la creatividad todo de la mano de un gran equipo de profesionales de los eventos que son, sin duda,  artesanos de la hospitalidad

Sí, lo sabemos, elegir las bebidas adecuadas para tu evento puede ser abrumador y más con la gran cantidad de opciones en destilados que existen hoy en día, la decisión, se vuelve aun más complicada. 

Por eso a la hora de elegir debes tomar en cuenta lo que se podría convertir en 2el gran diferenciador” de tu evento. Por ejemplo:   fijarnos en la esencia artesanal, eso siempre nos cautiva, el lujo y tal vez lo más importante, en la historia que una bebida tenga para ofrecer. 

Hoy queremos presentarte METAXA, el espirituoso griego, si, una bebida creada en El Pireo, el principal puerto de la ciudad de Atenas, uno de los más grandes de toda Europa.

Esta bebida podría pasar por un coñac, o un brandy luminoso, sin embargo, sus atributos, como el aroma y su distintivo rostro ámbar, resaltan su auténtico sabor. 

La historia de este destilado comenzó en el siglo XIX, específicamente en el año 1888 cuando Spyros Metaxa, nacido en Grecia y de familia de mercaderes, decidió fundar su propia empresa, y explorando el mundo encontró los ingredientes que, en combinación con los de su tierra natal, le ofrecerían un producto único. 

Su calidad depende de la tierra donde crecen sus uvas, en el Monte Ampelos (que significa vino en griego), la montaña más alta de la isla de Samos, cuyas pendientes están cubiertas por viñedos de uva moscatel las cuales se dan en muy pocas latitudes del mundo, por lo que las que nacen en esta isla situada en el Mediterráneo oriental, tienen un gran valor al ser cosechadas a mano y provenir de viñedos que han sido famosos a nivel mundial desde los tiempos de los comerciantes en la Antigua Grecia. 

Desde su creación Metaxa ha destacado por varias razones. La primera es la paciencia: el añejamiento se resguarda en las bodegas Metaxa hasta que alcanza el punto de madurez indicado. La segunda razón es por su distintivo aroma a cáscara de naranja, café, chocolate y a roble tostado. Por último, su elegancia gracias a esa mezcla entre frutos secos, naranja y especias. 

¿No se te antoja? Una bebida con el sabor de las islas griegas para tu próximo evento.

Hablar del wedding planner Carlos Guillermo es como hacer un viaje en el tiempo, como entrar a una escena de esas películas clásicas y entender la elegancia desde otro punto de vista. 

Carlos Guillermo es un gran romántico, amante de las calles parisinas y de la música que enchina la piel, con su marca ha logrado redefinir en México  el concepto de coordinador de bodas llevándolo a transformar lo ya conocido. Con él todo puede manipularse, extenderse y encontrar una forma inesperada, al tiempo que la armonía hace de las suyas para garantizar que todo tenga sentido y, sin duda, que un sueño se consolide en el marco de una celebración digna de cuento de hadas. 

La creatividad de Carlos Guillermo no encuentra límites además tiene un entendimiento maestro del lujo, sabe a ciencia cierta, cómo transfigurar una boda y hacerla exquisita.

"Cuando creces imaginándote lo que quieres hacer, resolviendo todo lo que pensaste, te vas dando cuenta que tú solito puedes diseñar, producir  y, posteriormente, alguien tiene que darle seguimiento a toda la operación que surgió en tu cabeza"

Los retos, deben ser un elemento básico en la concepción de todo proyecto. Esa, justo esa, es su parte favorita.

Carlos Guillermo se define como un verdadero amante de lo que hace, la parte creativa es una de sus favoritas, Para él se trata de "dejar volar tu imaginación y aterrizar con las ideas que tienen a un proyecto hecho a mi manera", dice. Su esencia es lo simple y sencillo hecho sin duplicar. 

Para  Carlos Guillermo es más importante saber qué es lo que ven los novios  para entender sus referentes y, ahora sí, plantear un canal de comunicación en donde la estética encuentre formas únicas. "El objetivo es que vívan cómo son ellos... conocerlos e imprimirlos en un diseño".

La personalidad de cada pareja es clave para entender, desde esas primeras palabras, qué escenarios, ambientes y propuestas decorativas encuentran su mejor forma para reflejarla.

El montaje de cada producción es el  momento donde todas las ideas que en algún momento habitaron en papel  ahora encuentran su forma y realidad. La integración del todo es uno de los momentos que, sin lugar a dudas, se elevan como el gran estandarte de su trabajo. Nada se olvida. Nada sale de control. Todo se encamina a la perfección.

Más allá de los aspectos técnicos y la hechura a la medida de la boda, Carlos Guillermo confiesa que su parte favorita es al día siguiente, cuando los novios le envían ese mensaje:  "gracias, hiciste mi sueño realidad"

"Todos los eventos van a tener su personalidad propia, pero todos van a tener la constante de que haya un punto de impacto todo el tiempo que pueda volverse viral"